El JKS Jarosław no jugará en la tercera división. Perdió en Gorlice.

Decir que el equipo de Jarosław perdió este partido por decisión propia sería una exageración. Decir que fueron mejores futbolísticamente que su oponente es mucho más cercano a la realidad, pero eso no importa. No se conceden goles por la impresión artística. El equipo de Bogdan Zając no se acostumbró durante mucho tiempo al mal estado del campo del estadio OSiR de Gorlice, donde el balón obró milagros, pero eso también es menos importante. Las condiciones para ambos equipos eran idénticas.
Si tuviéramos que contar el tiempo de posesión del balón, sin duda estaría del lado del equipo de Jarosław. ¿De qué servía cuando faltaban varios elementos básicos del juego futbolístico en tales casos: precisión, paciencia, cambio de ritmo y el pase final? La posesión del balón no se traducía en absoluto en la creación de situaciones. El ataque posicional era demasiado predecible para el combativo rival. El equipo de Jarosław tenía demasiados puntos débiles. Pawel Oziębło y Volodymyr Zastawnyj no eran suficientes. Glinik jugó con inteligencia, ya que tras marcar el gol, cuando dos líneas de apoyo de Maksym Guridov cometieron un error, se centró en la destrucción. Fue una buena decisión, ya que la monotonía y la falta de repetición por parte del JKS permitieron que el portero de Glinik no tuviera que esforzarse.
Desde el comienzo de la segunda mitad, el entrenador B. Zając realizó varios cambios en la alineación, optando por jugar con tres defensas. Fue una mala decisión. El jugador más desafortunado del partido fue Sebastian Kocój, quien entró tras el descanso, primero cabeceó el balón hacia su propia portería para el 2-0 y en el minuto 85 recibió la tarjeta roja. Wojciech Reiman, ausente en los últimos partidos por lesión, también saltó al campo. Apareció porque no tenía otra opción, pero no estaba en plena forma. Durante más de quince minutos (el árbitro de Ruda Śląska, Tomasz Kuroptawa, dirigió el partido con gran maestría), el líder del JKS infundió esperanza en la afición, aprovechando el penalti. A pesar de su ambición y disposición, el equipo de Jarosław no logró sacar nada más de sí mismo. Atacó con nerviosismo y caos, algo que el rival aprovechó con astucia.
El pitido final trajo una gran alegría al equipo de Gorlice, pues sabían perfectamente que no eran el mejor equipo. Como recompensa, jugarán la final del play-off de ascenso a la tercera división contra el Naprzód Jędrzejów.
Glinik Gorlice – JKS Jarosław 2:1 (1:0)- Gol: Reiman (81º – penalti).
Actualizado: 19/06/2025 19:48
Zycie Warszawy