La tasa de vacunación vuelve a caer: el GGD da la voz de alarma para la salud pública

ANP / ANP / Koen van Weel

La tasa de vacunación infantil continúa disminuyendo y, en cada vez más regiones, se encuentra por debajo del umbral crítico de inmunidad de grupo. El GGD GHOR Nederland alerta y advierte que, sin inversiones estructurales, la resiliencia de la sociedad se verá gravemente afectada.

El Informe sobre la Tasa de Vacunación 2024, publicado recientemente por el RIVM, muestra que la proporción de bebés y niños pequeños vacunados contra enfermedades infantiles graves como la difteria, la tos ferina, la poliomielitis y el sarampión ha disminuido ligeramente. Esto significa que, en cada vez más lugares, la tasa de vacunación está por debajo del estándar de la OMS del 90 % al 95 %. Este estándar es crucial para la inmunidad de grupo, que permite proteger también a las personas vulnerables de los brotes.

El RIVM señala que el descenso también podría afectar a otras enfermedades como la tos ferina , relativamente común entre los niños pequeños y con consecuencias graves. Además, se teme que la concentración de personas no vacunadas en ciertos barrios o grupos pueda provocar brotes locales que se extiendan rápidamente.

Ton Coenen, director de GGD GHOR Nederland, señala una preocupación más amplia. «La tasa de vacunación entre niños pequeños y preescolares es demasiado baja. Pero, en el fondo, vemos que los cimientos se están desmoronando. Todo el control de enfermedades infecciosas está bajo presión: los brotes son difíciles de contener. De esta forma, la resiliencia de la sociedad se está debilitando poco a poco».

Coenen explica que no se trata solo de una cuestión de números, sino de un problema estructural dentro de la salud pública. «Los GGD solo reciben dinero para implementar el Programa Nacional de Vacunación, pero no para actividades estructurales que aumenten la tasa de vacunación. Por lo tanto, somos formalmente responsables del éxito, pero no recibimos recursos para ello».

Esta situación se refleja también en los rankings internacionales, donde los Países Bajos muestran un descenso en el índice de derechos del niño de KidsRights.

Para contrarrestar el descenso, en algunas ciudades se han realizado esfuerzos adicionales mediante campañas orientadas a los barrios. Se contacta a los padres a nivel local con información adecuada y oportunidades de vacunación. Coenen confirma el efecto positivo. «En la práctica, vemos que un enfoque orientado a los barrios funciona: proporcionar información y vacunación localmente aumenta el alcance. Pero esta no es una solución a largo plazo». Según él, es importante que este enfoque cuente con financiación estructural para que no se quede en un pico temporal, sino que genere una mejora duradera.

La preocupación por la disminución de las tasas de vacunación también está relacionada con la creciente amenaza de brotes y epidemias. Coenen advierte que la capacidad de responder con rapidez y eficacia es limitada. «Sin fortalecer la salud pública, simplemente no estamos preparados para la próxima pandemia».

Esto no sólo puede provocar enfermedades graves entre los grupos vulnerables, sino también desestabilización social y sobrecarga de las instituciones sanitarias.

Según los expertos y el GGD GHOR, invertir en prevención y vacunación es la manera más eficaz de ahorrar costos en atención médica y mejorar la salud pública. Las vacunas no solo protegen a los niños, sino que también previenen la propagación de enfermedades y la aparición de brotes a gran escala.

Según el GGD, la tendencia actual a la baja en las tasas de vacunación requiere una atención especial y, sobre todo, una financiación permanente y estable para el control de enfermedades infecciosas a nivel local. Ton Coenen enfatiza la urgencia: «Esto no es un lujo, sino esencial para proteger a nuestros niños contra las enfermedades infecciosas. Como sociedad, no debemos aceptar que esta protección esté bajo presión».