Un reciente estudio colectivo publicado por el "Foro de Reforma Árabe" analiza las medidas de protección social implementadas por varios países MENA, principalmente Marruecos, seguido por el Líbano y Jordania. La investigación destaca la participación de la institución ejecutiva de Marruecos en el establecimiento de un sistema de protección social en los últimos años, examinando cómo el país puede buscar ingresos fiscales alternativos para financiar esta amplia iniciativa. Subraya que la “estructura heterogénea de la economía nacional y la existencia de un sector informal complican el progreso en esta área”.
El estudio describe el camino recorrido por Marruecos, comenzando con reformas legislativas, avanzando hacia la implementación de protección social tanto para los asalariados como para los trabajadores informales, y culminando con la concesión de subvenciones para niños pequeños en edad escolar en función de su situación familiar.
El informe enfatiza que “la reforma tributaria y la aplicación del impuesto a la propiedad juegan un papel fundamental en esta reforma social, a diferencia de las contribuciones sociales impuestas sobre los ingresos del trabajo; Apuntar a los activos inmobiliarios puede crear una base impositiva más justa y equilibrada”. Además, señala que “la focalización en propiedades de mayor valor podría cubrir una sexta parte de los costos anuales de todos los programas de protección social planificados en Marruecos, o una cuarta parte del fondo de solidaridad para grupos vulnerables”. Sin embargo, la imposición del impuesto sobre el patrimonio se complica por el temor a la fuga de capitales, destacando que “el uso de impuestos para financiar la protección social proporciona una fuente de financiación más estable”.
La investigación también señala que un sistema de protección social financiado con impuestos suele ser más adaptable a los cambios económicos y demográficos en comparación con otros mecanismos de financiación, particularmente durante las crisis económicas. Sugiere inspirarse en el modelo francés de protección social, que ha ampliado la financiación más allá de las contribuciones de los trabajadores al utilizar los impuestos a la propiedad como fuente sostenible.
Finalmente, el documento analiza los impuestos a la propiedad como una solución efectiva a diversos problemas sociales en la región MENA, particularmente considerando la aguda escasez de financiamiento en los programas de protección social. Sin embargo, genera preocupación sobre la voluntad de apalancar el sector inmobiliario para absorber el exceso de capital, especialmente a medida que el sector agrícola disminuye.
El estudio titulado “Impuestos sobre la propiedad: oportunidades perdidas para la financiación de la protección social integral en el Líbano, Marruecos y Jordania” indica que el aspecto solidario de la financiación de la protección social en Marruecos, especialmente para los grupos vulnerables, “requiere una financiación más sustancial y estable”, al tiempo que enfatiza la necesidad de fuentes de financiamiento diversificadas para mejorar la equidad social, en medio de un presupuesto que depende en gran medida del financiamiento estatal y de programas sociales previos.