Encuesta de CBS News revela caída del apoyo al programa de deportación de Trump

Después de seis meses que incluyeron una serie de logros en los objetivos legislativos del presidente Trump, las opiniones sobre su segundo mandato están cada vez más definidas por la diferencia entre su base política, a la que le gusta lo que ve, y el resto del país, que tiene crecientes dudas.

En el ámbito económico, esto se debe a los constantes llamados a centrarse más en los precios que en los aranceles, a lo que la mayoría de los estadounidenses se opone. Y ahora, está la Ley One Big Beautiful Bill , que, al menos inicialmente, la mayoría cree que beneficiará a los ricos.

En materia de deportación , las diferencias se centran en quiénes y cuántos estadounidenses consideran objetivo, así como en el uso de los centros de detención. En este caso, la base política republicana y la del MAGA (Hacer Grande Nuevamente) siguen aprobando abrumadoramente todo el asunto, pero el resto de la población estadounidense lo ha rechazado.

(En otro tema, en comparación, la mayoría dice que el caso de Jeffrey Epstein no es muy importante en sus evaluaciones del presidente y, en particular, la base MAGA del presidente sigue aprobando abrumadoramente su desempeño laboral, especialmente en inmigración).

La mayoría ahora dice que la administración no está priorizando a los criminales peligrosos para la deportación y también está deportando a más personas de las que pensaban que lo haría.

El programa tuvo apoyo mayoritario al principio del mandato, pero hoy no lo tiene, en consonancia con esa percepción de quién está siendo deportado.

Mientras tanto, la mayoría desaprueba el modo en que la administración está utilizando los centros de detención.

La aprobación del programa de deportación ha ido disminuyendo en estos meses hasta llegar a ser ligeramente negativa ahora, con un apoyo cada vez más exclusivo entre republicanos y simpatizantes del movimiento MAGA.

Los hispanoamericanos, al igual que el resto de los estadounidenses, afirman que los hispanos están siendo el objetivo de búsquedas más frecuente que otros, y quienes piensan así dicen que eso es injusto.

Como resultado, la aprobación hispana del programa de deportación y del Sr. Trump en general es menor hoy que al principio de su mandato. (Para un contexto más amplio, durante las elecciones de 2024 , el Sr. Trump logró ganarse el apoyo del electorado hispano y comenzó su mandato con la aprobación de la mitad de los hispanos. Hoy cuenta con un tercio).

Esto, a pesar de la opinión pública generalizada de que las políticas de Trump han reducido los cruces fronterizos.

Esto sugiere que las notas decrecientes del Sr. Trump en materia de inmigración en general están más relacionadas con su programa de deportación que con la actividad en la frontera en estos días.

Y, en general, es un ejemplo de cómo puede oscilar el péndulo político en la política estadounidense: durante el primer año de la presidencia de Joe Biden, la mayoría de los estadounidenses afirmaron que él y los demócratas no estaban siendo lo suficientemente duros con la inmigración. Hoy, la mayoría de los estadounidenses opina que Trump y los republicanos están siendo demasiado duros.

La mitad del país (de nuevo, en gran medida fuera de esa base política) ahora dice que el presidente se está centrando demasiado en la deportación.

¿En qué quiere la gente que se centre el Sr. Trump? Eso no es noticia: siguen siendo los precios, como ha sido durante todo el mandato. Siete de cada diez dicen que el gobierno no está haciendo lo suficiente para intentar bajarlos.

La inflación y los precios son importantes para la mayoría a la hora de evaluar al Sr. Trump en general.

Casi dos tercios ahora desaprueban la manera en que Trump está manejando la inflación, el mayor nivel de desaprobación hacia él hasta el momento.

Y por primera vez, una pluralidad dice que la administración se está centrando demasiado en recortar el gasto.

En términos más generales, y tras una intensa campaña sobre inmigración e inflación, la mayoría de los estadounidenses aún afirman que Trump está cumpliendo sus promesas. Sin embargo, ahora son menos los que lo hacen que al principio de su mandato, debido en parte a que menos independientes y demócratas piensan así. Los republicanos, en general, coinciden en que es coherente.

En el debate, tal como es, sobre las tasas de interés, los estadounidenses están divididos en su deseo general para la economía: si la mayor prioridad debería ser mantener las tasas de interés donde están para controlar la inflación, o bajarlas para que pedir dinero prestado sea más fácil.

En medio del debate en torno a Trump y el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, una gran mayoría dice que la Fed debería actuar independientemente del presidente.

Pero todo esto tiene una salvedad: muchos admiten que no saben mucho sobre lo que hace la Reserva Federal.

Powell recibe una confianza mixta, con los demócratas expresando más confianza en él que los republicanos, tal vez otro ejemplo de cómo el partidismo puede sustituir puntos de vista económicos más técnicos.

Seis de cada diez desaprueban la ley One Big Beautiful Bill. La opinión actual sobre ella es similar a la que existía antes de su aprobación: la mayoría cree que perjudicará a los pobres y beneficiará a los ricos. Menos creen que beneficiará a la clase media o trabajadora.

Dado que muchos estadounidenses dicen que no conocen muchos de los detalles del proyecto de ley, la respuesta inicial parece muy partidista y abre el camino a una lucha que podría durar meses para definirlo y venderlo.

Y así, la aprobación general del Sr. Trump también continúa disminuyendo, como lo ha hecho de forma consistente, aunque gradual, desde el inicio de su mandato. Ahora se acerca al nivel en el que se mantuvo durante gran parte de su primer mandato, cerca del 40%, con una estructura subyacente similar de sentimiento negativo, más allá de esa sólida aprobación de la base.

A pesar de toda la información de la semana, el asunto de los archivos de Epstein no está afectando la aprobación general de Trump entre su base MAGA. Para empezar, a los republicanos y a los MAGA les gusta su gestión de la inmigración, especialmente, y dicen que lo evalúan más por eso.

El caso Epstein no tiene la misma importancia. Pocos republicanos, incluyendo los partidarios de MAGA, afirman que los asuntos relacionados con el caso Epstein influyen mucho en su evaluación de la presidencia de Trump.

Dicho esto, hay cierta insatisfacción relativa dentro del Partido Republicano, incluida la base de MAGA, con el modo en que la administración está manejando la situación.

Los estadounidenses quieren que se publiquen los archivos; esto incluye a demócratas, republicanos, MAGA en particular y una amplia gama de grupos.

La gran mayoría de los estadounidenses sospecha que los archivos contienen información perjudicial sobre personas poderosas y ricas.

Esta encuesta de CBS News/YouGov se realizó con una muestra representativa a nivel nacional de 2343 adultos estadounidenses entrevistados entre el 16 y el 18 de julio de 2025. La muestra se ponderó para ser representativa de los adultos a nivel nacional según género, edad, raza y educación, con base en la Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense del Censo de EE. UU. y la Encuesta de Población Actual, así como en las elecciones presidenciales de 2024. El margen de error es de ±2,5 puntos.