Kendall Jenner y Alex Consani lucen la tendencia Naked Dress en la pasarela de Schiaparelli
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Kendall Jenner siguió con un vestido negro igualmente transparente, esta vez con lunares abstractos que en realidad eran mechones de tela similar al cabello. El diseño jugaba con la opacidad, combinando modestia y sensualidad, un tema que ahora se ha convertido en sinónimo de la estética del vestido desnudo.
Cortesía de la marca.
La tendencia de los vestidos desnudos se ha disparado en popularidad porque captura a la perfección el momento cultural actual: uno que celebra la confianza, la positividad corporal y la autoexpresión audaz. Con telas transparentes, drapeados estratégicos y siluetas que dejan al descubierto la piel, estos vestidos ofrecen una mezcla de sensualidad y alta costura que resuena tanto en alfombras rojas como en pasarelas. Las redes sociales han amplificado la tendencia, convirtiendo cada aparición en un momento viral. Diseñadores como Schiaparelli realzan el look con detalles artísticos, dándole un aire vanguardista en lugar de excesivamente atrevido. Es una celebración de la autoapropiación y de lucirla sin miedo.
En las notas del desfile para la última colección prêt-à-porter de Schiaparelli, Daniel Roseberry reflexiona sobre el cambio cultural del entretenimiento fugaz a la inspiración duradera, comparando las visitas a museos con la búsqueda de significado en una era digital sobresaturada. Trazando un paralelismo entre el legado de Elsa Schiaparelli y el hambre creativa actual, Roseberry posiciona la colección como una experiencia inmersiva, casi museológica, a partes iguales aspiracional, emotiva y liberadora. Ambientada en el Centro Pompidou, la muestra enfatiza el "hard chic" a través de una sastrería impecable, paletas minimalistas de negro, hueso y carmesí, y prendas de punto con efecto trampantojo inspiradas en sus propios dibujos y piezas de archivo de Elsa. Los accesorios, que incluyen versiones reinventadas del bolso Secret y zapatos surrealistas, se hacen eco del legado artístico de la casa. Desdibujando la línea entre la alta costura y el prêt-à-porter, Roseberry abraza la moda como una fantasía cotidiana: ingeniosa, emotiva y diseñada para ofrecer a quien la luce un momento de alegría sin filtros, como bailar solo en la oscuridad.
El look de vestido desnudo es todo un éxito. Estrellas como Tate McRae en los VMAs 2025 y Jenna Ortega en los Emmys 2025 también han adoptado esta tendencia, demostrando que es más que un momento viral: podría convertirse en un clásico de la moda para siempre. En la temporada primavera/verano 2026 de Schiaparelli, el vestido desnudo se elevó a la categoría de arte. Así que podemos esperar ver estos looks de pasarela llegar a las próximas alfombras rojas a medida que avanza la temporada de premios.
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