Reseña de la Rad Power Bikes RadRunner Max: más rápida y segura que nunca

Claro que, cuanto más energía usaba, más rápido veía cómo se agotaba la batería en la enorme pantalla a todo color de la RadRunner. Con la esperanza de acercarme a la autonomía de 96 km que anunciaba la moto, hice todo lo posible por mantener el motor entre 1 y 2 en llano y completamente apagado en los descensos. Gracias a los prácticos botones de pulgar de la moto, cambiar de configuración se volvió casi instintivo en segundos.
Y, como detenerse es tan importante como andar, los enormes rotores de 180 mm del RadRunner, que tienen 2,3 mm de grosor y funcionan con frenos hidráulicos, me dieron mucho poder de frenado, incluso mientras rodaba cuesta abajo por una pendiente del 12 por ciento una tarde lluviosa.
Fotografía: Michael Venutolo-Mantovani
En cuanto a seguridad, la RadRunner Max presenta dos mejoras importantes, además de su nueva batería. En primer lugar, su luz trasera no solo incluye intermitentes, sino también un radar que alerta a los conductores sobre el tráfico que se aproxima en un radio de 100 metros, mostrando incluso la velocidad del vehículo. También alerta a los conductores: su luz trasera parpadea al detectar tráfico.
En segundo lugar, la RadRunner Max está equipada con numerosas medidas de seguridad, como un llavero, conexión Bluetooth al teléfono, opción de desbloqueo con código (y la posibilidad de asignar varios códigos a varios usuarios) e incluso la función "Buscar mi" de Apple, que te ayudará a encontrar tu bicicleta si alguien la roba. ¿Yo? Soy de la vieja escuela, así que simplemente enrollé mi candado en U y el cable en el portaequipajes trasero, que no solo tiene una capacidad de 54 kg, sino que también cuenta con un soporte adicional para la batería, donde una segunda unidad puede duplicar la autonomía de 96 km.
¿Es la RadRunner Max perfecta? Para nada. Claro que ninguna moto lo es (excepto, por supuesto, una Dario Pegoretti pintada a mano, pero sigo sin poder convencer a WIRED de que me deje probar una). Aunque quizás le falte algo de altura (sin ánimo de ofender), sensación de conducción (al menos para mí) y opciones de color (aunque el acabado verde cazador con el distintivo emblema naranja de Rad sin duda resalta), la RadRunner Max lo compensa con creces en cuanto a utilidad, facilidad de uso, nuevas y atractivas características de seguridad y, quizás lo más importante, diversión.
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