Mistral, Doctolib, Voodoo… ¿Quiénes son los unicornios de la tecnología francesa?

Las cifras son impactantes. Tras solo dos años de actividad, la startup francesa Mistral anunció el martes 9 de septiembre que había recaudado 1.700 millones de euros. Esta empresa de inteligencia artificial diseñó, en particular, el chatbot Le Chat, competidor de ChatGPT. Con esta nueva ronda de financiación, su valoración casi se duplica, alcanzando los 11.700 millones de euros .
Mistral se une así al pequeño círculo de los "decacornios", startups valoradas en más de diez mil millones de euros. Si bien estos "superunicornios" siguen siendo escasos, los "unicornios" sencillos, valorados en más de mil millones de euros y que no cotizan en bolsa, han proliferado en Francia en los últimos diez años.
BlaBlaCar empezó a operar en 2015. La plataforma incorporó el coche compartido a la vida cotidiana de los franceses, ofreciendo tarifas más atractivas que el tren y viajes en zonas a veces muy aisladas. La empresa también se ha diversificado, por ejemplo, con la adquisición de Ouibus, que se convirtió en Blablabus, en 2019. La plataforma cuenta actualmente con 29 millones de usuarios activos en 21 países.
Poco después, dos startups poco conocidas para el gran público se unieron al club de los unicornios franceses: OVH, proveedor de servicios de Internet que ahora cotiza en bolsa , y Actility, especializado en objetos conectados, principalmente para fabricantes.
En 2019, Doctolib, ya una plataforma líder de reserva de citas médicas en línea, también superó los mil millones de euros de valoración. La COVID-19 le ha permitido crecer a un ritmo acelerado y alcanzar una valoración de alrededor de 5.800 millones de euros en 2022. Antes de su salida a bolsa, la plataforma de streaming de música Deezer también se encontraba entre los principales unicornios franceses.
A finales de la década de 2010, cuando Francia contaba con apenas unas pocas startups valoradas en más de mil millones de euros, Emmanuel Macron se fijó un objetivo inicial en este ámbito: alcanzar 25 «unicornios» franceses para 2025. Paradójicamente, la crisis sanitaria permitió superar este objetivo tres años antes de lo previsto. Aprovechando las buenas condiciones de inversión que ofrecían las políticas expansivas del Banco Central Europeo y la Reserva Federal, los fondos invirtieron masivamente en empresas francesas jóvenes.
En 2022, tras una ronda de financiación de 450 millones de euros, Back Market se convirtió en la startup tecnológica francesa de mayor valor, con 5.100 millones de euros. Si bien el futuro no ha sido tan prometedor para este "unicornio" especializado en la reventa de electrónica reacondicionada, el gran éxito de su recaudación de fondos demuestra el entusiasmo de los inversores en aquel momento.
Otras startups francesas se están beneficiando de esto, incluida Qonto, una empresa especializada en analizar el comportamiento en línea; Voodoo, un editor de videojuegos móviles; y Ledger, que ofrece billeteras en línea para proteger los activos criptográficos.
Lamentablemente, el clima ya no es tan favorable. Algunos inversores se alejan de los "unicornios", que rara vez son rentables y se les acusa de "quemar efectivo" con su modelo de hipercrecimiento. Esto podría poner en peligro el nuevo objetivo fijado por Emmanuel Macron en junio de 2022: alcanzar los 100 unicornios franceses para 2030.
La Croıx