Las viviendas pequeñas en Indonesia se enfrentarán a la escasez, una "legalización del hacinamiento extremo".

Para 2023, el déficit de vivienda en Indonesia se estimó en 9,9 millones. Esta cifra, ya de por sí preocupante, podría alcanzar los 15 millones este año, y el 80 % del déficit de vivienda se concentra en las zonas urbanas de este país de 283 millones de habitantes.

Ante la escasez, el presidente Prabowo Subianto lanzó en octubre de 2024 un ambicioso programa de "tres millones de viviendas" para construir viviendas sociales en las afueras de las ciudades. Se estima que el proyecto costará cerca de 1.500 millones de dólares (1.270 millones de euros). Sin embargo, la publicación de los primeros planos, que muestran unidades de entre 14 y 24 ^metros cuadrados, ha suscitado un intenso debate sobre su decoro y habitabilidad.

Debido a la presión inmobiliaria y la densificación urbana, el precio del metro cuadrado en Yakarta, la capital de Indonesia, se ha disparado hasta representar casi el 50% del ingreso anual promedio. Como resultado, más de 81 millones de millennials (nacidos entre principios de los años ochenta y finales de los noventa) no pueden acceder a la propiedad de una vivienda, y para 2024, Indonesia ocupará el cuarto lugar a nivel mundial en asequibilidad de la vivienda.

Para una gran parte de los jóvenes activos, “convertirse en propietario de una vivienda ya no es sólo difícil, se ha vuelto estructuralmente imposible”, resume Th