General Motors está despidiendo a trabajadores en masa debido a la débil demanda y al fin de los subsidios para vehículos eléctricos.

La tendencia a la reducción de personal en las principales empresas estadounidenses se está extendiendo. Apenas unos días después de que Amazon anunciara recortes de empleo, General Motors (GM) presentó el miércoles un plan para eliminar varios miles de puestos de trabajo en su división de vehículos eléctricos, principalmente en Michigan, Tennessee y Ohio.
El fabricante de automóviles planea despedir a aproximadamente 1200 empleados de su planta de vehículos eléctricos cerca de Detroit, así como recortar 550 puestos de trabajo en su planta de baterías Ultium Cells en el norte de Ohio. Simultáneamente, 850 empleados de esa misma planta serán suspendidos temporalmente, junto con otros 700 empleados en Tennessee.
“Ante la ralentización de la adopción de vehículos eléctricos a corto plazo y un entorno normativo en constante evolución, General Motors está reorganizando sus capacidades de producción”, explicó la compañía, al tiempo que reafirmó “su compromiso con su presencia industrial en Estados Unidos”.
La filial de Ultium especificó que la producción de celdas de batería en sus plantas de Warren (Ohio) y Spring Hill (Tennessee) se suspenderá temporalmente a partir de enero de 2026, una pausa que se espera que dure hasta mediados de 2026. Los empleados afectados continuarán recibiendo una parte sustancial de su compensación y beneficios durante este período.
Este cambio de enfoque se produce en un contexto de fuerte caída de la demanda de vehículos eléctricos en Estados Unidos. La eliminación, por parte del gobierno de Trump , del crédito fiscal federal de 7500 dólares para la compra de vehículos eléctricos ha perjudicado las ventas, al igual que la flexibilización de las normas sobre emisiones. Estos cambios de estrategia ya le han costado a GM 1600 millones de dólares este otoño en el marco de su programa de vehículos eléctricos.
Otros actores del sector están sintiendo las consecuencias: Ford ha pospuesto algunos de sus proyectos eléctricos y Tesla, líder del mercado, ha advertido que los próximos trimestres serán "difíciles" tras una fuerte desaceleración de las ventas.
GM insiste en que quiere reabrir la producción en las dos plantas de Ultium en el verano de 2026. Pero mientras tanto, la ola de despidos ilustra la fragilidad de una industria eléctrica sacudida tanto por las señales políticas de Washington como por el apetito ahora vacilante de los consumidores estadounidenses.
Le Parisien


