El mauritano Sidi Ould Tah elegido presidente del Banco Africano de Desarrollo
El ex ministro de Economía mauritano fue elegido presidente del Banco Africano de Desarrollo después de tres rondas de votación. Sucederá al nigeriano Akinwumi Adesina para un mandato de cinco años y deberá gestionar, en particular, la congelación de la financiación estadounidense.
El Banco Africano de Desarrollo (BAfD) eligió este jueves 29 de mayo a un nuevo presidente. Se trata de Sidi Ould Tah, ex ministro de Economía mauritano, quien asume las riendas de la institución tras tres rondas de votación celebradas en Abiyán, su sede. Con el 76,18% de los votos, ganó por un amplio margen frente a sus principales adversarios: el zambiano Samuel Munzele Maimbo (20,26%) y el senegalés Amadou Hott (3,55%), informa el medio camerunés News du Camer .
Sidi Ould Tah, que llegó tarde a la carrera, ha sabido transformar este retraso en una ventaja, subraya el medio panafricano Afrik.com . Gracias a su experiencia al frente del Banco Árabe para el Desarrollo Económico en África desde 2015, contó con dos palancas diplomáticas decisivas: la presidencia mauritana de la Unión Africana en 2024, que le otorgó mayor visibilidad, y el apoyo activo de Arabia Saudita y los países de la Liga Árabe.
Esta estrategia inteligentemente orquestada le ha permitido reunir una amplia coalición de apoyo en el continente y, más allá, entre los accionistas no africanos. Posicionado como un puente entre África y el mundo árabe, Ould Tah destacó su capacidad para atraer financiación significativa y activar recursos de los países del Golfo.
El primer mauritano en convertirse en presidente del principal donante multilateral de África, Sidi Ould Tah, toma las riendas de una institución que busca una renovación estratégica en un contexto mundial cada vez más competitivo, explica el medio de comunicación panafricano Éco-TransContinents Africa . Su elección marca un punto de inflexión para el BAfD, esperado con impaciencia en temas como la transición energética, la financiación masiva de infraestructura y la adaptación al cambio climático.
Entre los desafíos urgentes figura la retirada de Estados Unidos –uno de los principales accionistas– del Fondo Africano de Desarrollo, por un importe de 500 millones de dólares, un déficit importante que deberá ser cubierto rápidamente, como señala Mosaïque Guinée . Por lo tanto, es crucial identificar otras fuentes de financiación para apoyar este fondo, que es vital para el desarrollo de los países africanos más vulnerables.
Para abordar este problema, Ould Tah, de 60 años, presentó un programa estructurado en torno a cuatro ejes, según Afrik.com : reformar la arquitectura financiera de África, transformar el dividendo demográfico en palanca económica, industrializar África de forma sostenible y movilizar capital a gran escala. En esta dinámica, el economista senegalés Papa Demba Thiam, citado por Financial Afrik , considera que «el BAfD debe convertirse en un actor central de la industrialización africana y de la financiación del desarrollo inclusivo».
Courrier International