Varios partidos de baloncesto femenino estadounidense fueron interrumpidos por el lanzamiento de... juguetes sexuales desde las gradas.

Una extraña tendencia parece extenderse por las canchas de la WNBA. Desde finales de julio, varios partidos de la liga norteamericana de baloncesto —la contraparte femenina de la NBA— se han visto interrumpidos por el lanzamiento de juguetes sexuales a la cancha. La escena se repitió el martes 5 de agosto, durante el partido entre Los Angeles Sparks y las Indiana Fever. Esta fue la tercera vez en ocho días.

Una varilla de plástico verde neón, lanzada desde los asientos detrás de la canasta, cayó al suelo justo después de un tiro libre de la estrella de las Sparks, Kelsey Plum. Plum la desvió con una patada furiosa, mientras la seguridad del Crypto Arena subía a las gradas para intentar detener al alborotador.

Al caer, el objeto rozó por poco a la líder de las Fever, Sophie Cunningham. Tres días antes, en un mensaje compartido en redes sociales, había pedido que "dejen de lanzar consoladores a la cancha". "Van a lastimar a una de nosotras", escribió. Tras el partido, Kelsey Plum insistió en no darle demasiada importancia a este incidente, celebrando que todas las jugadoras, incluidas las árbitras, hubieran decidido "volver al partido".

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