El piloto autónomo de lujo de Toyota, Sébastien Ogier, gana el Rally de Portugal

Desde hace varias temporadas, Sébastien Ogier sólo es un piloto intermitente en el Campeonato Mundial de Rallyes (WRC). Esto no le impidió en ningún caso brillar como lo hizo en sus mejores años (ocho títulos mundiales de pilotos) cuando el equipo Toyota le confió, para algunas pruebas por temporada, el volante de uno de sus coches. El francés de 41 años lo confirmó al ganar el Rally de Portugal junto a su copiloto Vincent Landais el domingo 18 de mayo, al final del cuarto y último día de carreras.
El autónomo de lujo de Toyota superó al estonio Ott Tänak (Hyundai) por ocho segundos y a su compañero finlandés Kalle Rovanperä (Toyota) por doce. El vigente campeón del mundo, el belga Thierry Neuville (Hyundai), terminó quinto, por delante del líder provisional del campeonato, el británico Elfyn Evans (Toyota).
Tras haber estado mucho tiempo acechando a Tänak, Ogier tomó la delantera a última hora del sábado, aprovechando un problema mecánico del estonio.
El gapençais partía así el domingo con veintisiete segundos de ventaja y supo controlar la carrera para asegurar su tercer podio en tres carreras esta temporada, tras su éxito en Montecarlo a finales de enero y su segundo puesto en Canarias a finales de abril. Ogier consigue así su 63ª victoria en el WRC, la séptima en Portugal, todo un récord. Por otra parte, los 80 éxitos de Sébastien Loeb siguen siendo un lejano recuerdo.
Servicio de Deportes (con AFP)
Contribuir
Reutilizar este contenidoLe Monde