Tres experiencias imprescindibles en tu viaje a Nueva York

Nueva York, junto a París y Roma, se sitúa entre los destinos internacionales más demandados por los viajeros españoles para el verano de 2025, según Civitatis. Al mismo tiempo, otras informaciones apuntan a que los europeos dudan en irse de vacaciones a EE.UU., pues se han registrado reservas irregulares los primeros meses del año y hay un cierto clima pesimista entre los profesionales del sector. De hecho, el número de visitantes de Europa Occidental cayó un 17% en marzo, pero aumentó un 12% en abril respecto al mismo periodo de 2024, según la agencia estadounidense de turismo.
Y es que Nueva York es un destino soñado por muchos. La que es la capital económica y cultural más importante del mundo, ofrece un ambiente y un estilo de vida único en el descubrir sus imponentes rascacielos y demás puntos de interés, como son la Estatua de la Libertad, Times Square, Central Park o las impresionantes vistas desde el Empire State.
Pero, además de visitar estos lugares, merece la pena darse una vuelta por sus barrios y ver algunas de las atracciones más populares de la ciudad, como las que se encuentran ubicadas en el emergente barrio de Hudson Yards, en el West Side de Midtown Manhattan. Allí se encuentran:

Se trata de la plataforma de observación al aire libre más alta del hemisferio occidental con la que disfrutar de una de las mejores vistas de Nueva York a 345 metros de altura.
Cuenta con un mirador exterior cuyo suelo es de cristal, así como sus paredes, inclinadas, y escaleras exteriores, lo que te permite disfrutar de unas vistas inigualables del horizonte de Manhattan. Desde aquí, se puede divisar el Central Park, contemplar los grandes rascacielos de Manhattan e incluso ver la Estatua de la Libertad en el horizonte.
Nada más llegar al edificio, toca coger el ascensor (aunque también hay escaleras) hasta la planta 100. Se llega en menos de un minuto. Lo mejor es ir con reserva previa y acudir al atardecer para conseguir la foto perfecta.

Una de las experiencias que ofrece The Edge es City Climb, es decir, los visitantes tienen la oportunidad única de escalar el exterior del rascacielos y luego asomarse desde la plataforma exterior en lo alto del edificio.
El ascenso al edificio al aire libre más alto del mundo es sólo apto para los más aventureros. Lo mejor, es reservar la actividad con antelación (es un extra a la visita a The Edge) para después, equiparse con todo el material de seguridad necesario, desde los cascos hasta el mono y los arneses. A los participantes también se les explica una serie de normas básicas a respetar durante la actividad.
La experiencia City Climb consiste en una escalada por los exteriores del edificio 30 Hudson Yards, atravesando diferentes plataformas y escaleras, así como la zona del mirador The Edge, estando a más de 300 metros de altura, divisando todos los encantos de la ciudad.
La actividad dura entre 75 y 90 minutos y es sólo apta para menores de, al menos, 13 años (los escaladores de entre 13 y 17 años deberán estar siempre acompañados por un adulto), cuya altura se encuentre entre 1,50 y 2 metros y tengan un peso máximo de 140 kilos.

Vessel es una de las atracciones más fotografiadas de Nueva York. A sólo cinco minutos a pie de Edge, se encuentra esta maravilla arquitectónica y experiencia interactiva, ideada por el diseñador Thomas Heatherwick, cuya altura es de 45 metros.
El monumento, que reabrió sus puertas a los visitantes en octubre de 2024, consta de 154 tramos de escaleras interconectadas, formando una estructura tipo vasija desde el exterior.
Hay que comprar entrada para pasar a su interior y recorrer, así, sus 2.500 escalones y 80 rellanos que lo componen, disfrutando de diferentes perspectivas de la ciudad desde todos los ángulos a través de esta inmensa obra de arte cuyo diseño es único.
ABC.es