Luciano González Rizzoni, "la bola de demolición" de Los Pumas 7's: "El año pasado estuvimos cerca, así que ahora vamos por la doble"

Los Pumas 7's son uno de los seleccionados más poderosos del Circuito Mundial de Seven, en el que hace algunas semanas se coronaron campeones de la fase regular por segunda temporada consecutiva, con tres títulos, cuatro podios y un rugby altamente competitivo. Desde hace un tiempo largo, cada vez que los dirigidos por Santiago Gómez Cora saltan a la cancha, el gran protagonista es el equipo. Aunque este año hubo jugadores que sobresalieron por sus rendimientos y conquistas individuales y fueron claves en otra campaña histórica. Una de esas figuras fue Luciano González Rizzoni, que se ganó el reconocimiento de compañeros y rivales por su poderío físico, al punto que hoy lo conocen como "El Bulldog".
"No sabía que algunos de los equipos rivales me llamaban así, pero ahora todos los hacen. Es gracioso. Cuando escucho algunas cosas que dicen de mí, a veces no las creo. Pienso que exageran. Pero es lindo que me tengan identificado, porque habla del trabajo que vengo haciendo. Igual, trato de no quedarme con los comentarios y enfocarme en seguir evolucionando", comentó en charla con Clarín, días antes de partir hacia Los Ángeles, donde los argentinos disputarán este fin de semana la Gran Final y buscarán para ponerle el broche de oro al 2025.
En la fase regular -"la liga"-, el wing riojano de 28 años fue el mejor acarreador con 137 acarreos, contribuyó más off-loads, tackles y robos que cualquier otro argentino, llegó al try número 100 de su carrera en el Seven en la inolvidable cuarta coronación al hilo en Vancouver y fue elegido MVP de las Finales de Perth y del torneo canadiense. Y ahora es candidato al premio a Jugador del Año de la World Rugby, junto a Marcos Moneta y al español Pol Pla.
En la cancha, González Rizzoni es una aplanadora que combina potencia y velocidad. Cuando toma la pelota y encara hacia el ingoal no lo pueden detener. Y cuando quiere frenar a un rival, (casi) siempre lo consigue. John Manenti, entrenador de Australia, llegó a decir que es "una bola de demolición; le tiramos con una bacha de cocina y el tipo sigue de pie". Es un rol que le gusta y para el que hizo una preparación a consciencia, porque en sus primeros años en el equipo era un jugador más de velocidad.
"Me siento cómodo siendo el jugador más de impacto del equipo", aseguró. "Yo entré muy de chico al equipo, era mucho más flaco. Después pasó la pandemia, otras cosas, un par de lesiones... Entonces dije 'Hay jugadores bastante rápidos, ¿qué hace falta en el equipo?'. Faltaban más jugadores de impacto y vi la oportunidad de mejorar en eso. Empecé a trabajar, con herramientas de Santi y de varios fisioterapeutas. Todos supieron guiarme y fui evolucionando. Hoy soy bastante pesado, uno de los más pesados del equipo. Y estoy orgulloso y muy contento con los resultados".
¡Luciano González Rizzoni, el tractor riojano suelto en Vancouver! 🏉🇦🇷7️⃣🚜
4️⃣🏆 #LosPumas7s ganaron por cuarta vez consecutiva en Canadá.
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— ScrumRugby (@ScrumESPN) February 26, 2025
-El rugby es un deporte de muchos golpes, más cuando sos un jugador de impacto. ¿Disfrutás del aspecto físico del juego?
-Sí. Sé que esa es mi herramienta principal, entonces trato de disfrutarlo. A veces se hace un poquito más complicado. Los otros equipos te estudian, ya te tacklean de a dos o tres, y eso hace que sea un poquito más difícil. Pero no por eso no se puede disfrutar. Siempre fue así mi juego y lo fui perfeccionando y puliendo con el tiempo. Me sale bien y lo disfruto, salvo que esté muy golpeado (risas). Lo sufro después. Después de un fin de semana intenso, que son seis partidos, me cuesta recuperar un poquito, pero gracias a Dios tenemos gente que nos recupera bastante rápido.
"Muchas veces decimos que nosotros disfrutamos golpeándonos", continuó. "En la posición en la que estamos ahora, que somos un equipo al que todos le quieren ganar en el circuito, jugamos con esa presión y ese nerviosismo, y a veces te cuesta disfrutarlo. Capaz que en algún partido la pasamos mal, pero son cosas del juego. Pero cuando el equipo tiene ese aura, esa energía de que juega y le salen todas las cosas, los partidos se disfrutan mucho".
-¿En qué pensás cuando tomás la pelota y empezás a encarar rivales? ¿Aparece el miedo o la cautela por tratar de no golpearte?
-Lo único que quiero es llegar al ingoal sin que nadie me voltee. Es lo único en lo que pienso en ese momento. El riesgo de lastimarte está. Al ser un deporte de contacto físico bastante intenso, sabemos lo que puede pasar. Pero ir con ese miedo es peor, porque te limitás. Miedo nunca tuve y nunca lo voy a tener. Ojalá nunca me golpee, pero si lo hago, sé que son consecuencias del juego. Y no me asusta.
"Pensé, ¿qué hace falta en el equipo?. Faltaban más jugadores de impacto y vi la oportunidad de mejorar en eso", contó González Rizzoni sobre el proceso que lo llevó a ser una topadora en la cancha. Foto Prensa UAR
-Cuando vas corriendo, esquivando rivales, buscando el hueco para escaparte, ¿jugás por instinto o hay una planificación detrás?
-Cuando agarro la pelota solo y me empiezo a mover como loco por todos lados, lo hago mucho por instinto. Pero estudiamos mucho a los rivales antes de enfrentarlos. Y creo que el 90 por ciento de las decisiones de los partidos se basan en todo ese trabajo previo. Hay una cuota de improvisación. A veces, cuando las cosas están complicadas, hay que improvisar, como hace Marcos, Santi (Mare, el capitán) y varios del equipo, que improvisan bastante bien. Pero como dice Santi (Gómez Cora), somo 14 grandes jugadores, pero si todos improvisamos, el equipo no va a andar. Así que la prioridad es siempre respetar el plan de juego.
González Rizzoni nació en La Rioja, donde empezó a jugar al rugby en el Club Social cuando era muy chiquito. Cuando tenía ocho años, su familia se instaló en Villa General Belgrano, desde donde viajaba 120 kilómetros todos los días para ir a entrenar al club La Tablada de Córdoba o con Los Pumitas. Fueron años de muchos sacrificios.
"Mi familia siempre fue del ambiente del rugby, así que la conexión y el fanatismo viene desde muy chico. Lo seguía a mi viejo y lo veía jugar. Y a los 4 años ya me mandaron a un club. De todos mis hermanos varones, fui el primero que se enganchó con el rugby", recordó.
"Pensé en decirle que no al Seven y seguir apuntando al XV. Pero también pensé que esta podía ser una gran oportunidad, y así fue", afirmó González Rizzoni. Foto Prensa UAR
"Al principio fue un poco difícil. La mayor parte del sacrificio fue de mis viejos, porque ellos me llevaban de un lado a otro, me daban de comer, fue todo un esfuerzo. Era difícil el viaje que duraba dos horas, si no había tráfico, tomarse no sé cuántos colectivos para llegar al club, levantarse a la madrugada para poder viajar. Mis hermanos también me dieron una mano gigante para llevarme a los entrenamiento a las 5 de la mañana. Gracias a Dios tuve una familia que me pudo apoyar", afirmó.
Y agregó: "Es algo de lo que que me gusta hablar mucho, para que los chicos del interior, que capaz que piensan que no tiene chances, sepan que sí, siempre hay chances. Es difícil, pero no imposible. Si se pone un poquito de sacrificio, voluntad y pasión, se puede".
-Arrancaste jugando al rugby XV. ¿Cómo llegaste al Seven y a los Pumas 7's?
-Tenía apenas dos o tres partidos de Seven cuando me llamaron del seleccionado de Córdoba para jugar en esa modalidad. Yo estaba en el seleccionado de XV, pero por un malentendido con los entrenadores, medio que me dejaron de lado. Entonces me fui con el Seven y empecé a jugar. Y lo de Los Pumas, nunca me lo esperé. Me levanté un día de vacaciones a las 12 del mediodía, pleno diciembre, a fines de 2016, y tenía una llamada perdida de un número de Buenos Aires. Era para ir a jugar al seleccionado. No lo podía creer. Fue todo muy imprevisto y muy rápido. Porque tenía muy pocos partidos jugados en el Seven y después llegué a hacer una gran carrera.
-¿Dudaste en aceptar la convocatoria de Gómez Cora?
-El sueño cuando éramos chicos era llegar a Los Pumas. El Seven no estaba tan visto. Pensé en decirle no para seguir apuntando al XV. Pero también pensé que podía llegar a ser una gran oportunidad. Y gracias a Dios así fue. Y la pude aprovechar.
El 𝗠𝗩𝗣 de la final. 💥#SeVenComoNunca pic.twitter.com/lnYVPcfJqJ
— Los Pumas 7s (@lospumas7arg) January 27, 2025
-¿Qué es lo que más te gusta de esta modalidad del rugby?
-Que los siete que entran a la cancha pueden cumplir cualquier función. Que es muy dinámico, para verlo pero también para jugarlo. Requiere de un rigor físico muy grande. Muchos dicen 'Ah, son 15 minutos nomás'. Pero son los peores 15 minutos que te pueden pasar en tu vida. Y que es divertido porque en esos 15 minutos podés ver como 50 tries y pueden pasar miles de cosas.
-Te sumaste a Los Pumas 7's después de los Juegos de Río y desde entonces el equipo viene en una curva constante de crecimiento. Cada temporada, suben un poquito más la vara. ¿Cómo lo explican?
-Ya estoy viejo, estoy hace mucho (Risas). Pero eso es muy lindo. Y ver el cambio que hizo el equipo también. La clave para mí fue que el grupo sea lo más unido posible, conocer al que tenés al lado, saber cómo juega, cuándo está bien, cuándo le pasa algo y necesita que des un poquito más... Además, en un punto de este proceso nos sinceramos, nos planteamos ser siempre claros y transparentes con nosotros mismos y eso llevó al equipo a disfrutar, que es también muy importante. Al estar en un seleccionado, sentís muchos nervios y presión y habíamos llegado un punto en el que no disfrutábamos. Pero si disfrutás, si te divertís, viajás con ganas. Y si viajás con ganas, jugás mejor. No fue algo que pasó de un día a otro, fue una evolución. Lo fuimos hablando y se armó un equipo bastante más maduro, más competitivo y bastante compañero.
-Pensando más allá de Los Ángeles, ¿imaginás un futuro en el XV o querés seguir en el Seven?
-Es algo que vengo pensando. Me gustaría jugar en el XV. Creo que si me llega la oportunidad de ir a Los Pumas, como le llegó a Rodri (Isgró), la agarraría. No la dejaría pasar. Pero si no llega, no me quiero volver loco. Estoy muy cómodo y muy contento en este equipo. Estoy haciendo lo que me gusta y el Seven está teniendo una trayectoria bastante interesante. Antes, nadie decía 'Che, quiero jugar rugby Seven'. Ahora los chicos en la calle nos dicen 'Quiero jugar algún día en los Pumas 7's con vos'. Y eso es muy lindo.
¡Campeones de la liga! 🔝Líderes de la fase regular del Circuito Mundial con 106 puntos.🥈 Dubai🥇 Ciudad del Cabo🥇 Perth🥇 Vancouver👉 5° Los Ángeles👉 9° Hong Kong👉 5° Singapur
¡Vamos Argentina!#SeVenComoNunca pic.twitter.com/2QV3uFMisC
— Los Pumas 7s (@lospumas7arg) May 5, 2024
Los Pumas 7's se consagraron por segunda temporada consecutiva como el mejor de la etapa regular del Circuito Mundial, en la que se coronaron "Campeones de la Liga". Con tres títulos (Perth, Vancouver y Hong Kong, cuna del Seven) y dos bronces (Dubai y Singapur, fecha en la que aseguraron el título al llegar a semis), quedaron primeros con 104 puntos, por delante de Fiji (96) y España (88). Y González Rizzoni tiene bien claro por qué el equipo pudo repetir el festejo de 2024.
"Nos quedamos un poco con una pica después de los Juegos Olímpicos, en los que no nos fue como queríamos. Estábamos para mucho más (NdR: Eran grandes candidatos al oro y terminaron séptimos). Después de ese torneo, dijimos 'Si le vamos a poner pila a esto, queremos que el equipo sea competitivo y apuntar de nuevo al 2028 de la mejor manera'. Ni bien se terminó París, empezamos a trabajar ese proceso de nuevo y creo que venir con esa base armada te cambia el panorama. Además, saber que ya hiciste destrozos la temporada pasada y que lo podés hacer de nuevo fue clave para no conformarnos con lo que ya habíamos hecho. Y fuimos evolucionando también: los primeros dos torneos no se dieron los resultados, pero comenzamos este 2025 con tres títulos. Ver que el equipo iba funcionando a medida que pasaba el año nos dio confianza", reflexionó el riojano.
-¿Qué título se disfrutó más?
-El año pasado, al ser el primero, la alegría que teníamos era inmensa. Pero yo disfruté mucho más el segundo. Este año fue un poquito más tranquilo, no estuvimos hasta último momento con el miedo de si éramos o no éramos campeones. Me acuerdo que después de la victoria ante Gran Bretaña en Singapur, vino Santiago y preguntó si alguien sabía que con ese triunfo éramos campeones de la fase regular y todos respondimos que no. Y eso habla bien del equipo porque no jugamos por los resultados, si no por ganar y mejorar. Este año fue increíble y por eso para mí, el título se disfrutó más.
Este fin de semana, Los Pumas 7's irán por la frutilla del postre. Porque disputarán la Gran Final de Los Ángeles, un torneo que reúne a los mejores ocho de la fase regular. Habrá dos grupos de cuatro. Los argentinos debutarán en el A el sábado a las 16.34 ante Gran Bretaña. Luego chocarán con Francia a las 19.35 y con Sudáfrica a las 22.46. En el B se enfrentarán Fiji, España, Australia y Nueva Zelanda. Los dos mejores de cada zona avanzarán a las semifinales, que se disputarán el domingo desde las 17.24. Y la final será a las 21.41.
"Nos quedamos con la pica del año pasado y queremos la revancha en la Gran Final", anticipó González Rizzoni. Foto Prensa UAR
Por decisión de la World Rugby, ese certamen reconoce al ganador como "Campeón del Año". La temporada pasada, Argentina se quedó con las ganas de llevarse también ese título al perder el duelo decisivo con Francia, que había quedado quinto en la fase regular con 26 puntos menos que Los Pumas.
"Vamos por la revancha", afirmó González Rizzoni. "Nos quedó la pica del año pasado, porque sentimos que no es justo que el que salga campeón del año sea el que gana ese torneo. Si lo gana Fiji, por ejemplo, que podría cambiar el resultado de la general, estaría bien. Pero que un equipo que venía séptimo o octavo salga campeón y quede nombrado como el mejor del año, no creo que sea justo. El año pasado estuvimos cerca, así que ahora vamos por la doble".
Y cerró: "Es a matar o morir. Son dos zonas de cuatro equipos, va a ser una batalla campal. Es el último torneo del año, así que más allá de pensar en el crecimiento del equipo, esta vez vamos a ir por el resultado porque queremos ganar".
Clarin