Muere Sonallah Ibrahim, icono de la literatura árabe contemporánea, a los 88 años
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El reconocido escritor y autor egipcio Sonallah Ibrahim murió este miércoles a los 88 años, dejando tras de sí una trayectoria literaria de más de cinco décadas y un legado humanitario que lo consolidó como una de las figuras más influyentes del movimiento literario árabe contemporáneo.
Nacido en El Cairo en 1937, Ibrahim no solo se destacó como uno de los novelistas más importantes del siglo XX en el mundo árabe, sino que también fue pionero en abrir nuevos caminos para la crítica social a través de un estilo narrativo innovador y profundamente realista. Sus obras ofrecieron nuevas perspectivas dentro de la narrativa árabe, integrando temáticas sociales, políticas y existenciales con una mirada aguda y crítica.
Graduado de la Facultad de Artes de la Universidad de El Cairo, Sonallah Ibrahim se convirtió en una figura central en la literatura árabe contemporánea por su compromiso con las causas humanas, su representación fiel de la realidad egipcia y árabe, y su capacidad para documentar, desde la literatura, procesos históricos, sociales y políticos fundamentales. Su obra también ofreció una introspección única de su vida personal, convirtiéndolo en un cronista literario de su tiempo.
Una prolífica obraEntre sus novelas más destacadas se encuentran Sharaf, que aborda problemas sociales y está considerada como la tercera mejor novela árabe de la historia; Zat, que narra transformaciones sociales a través de documentos personales; así como Estrella de Agosto, Beirut, El Nilo: Tragedias, Warda y El turbante y el sombrero.
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Varias de estas obras han sido traducidas al español, como A escondidas, El comité y Ese olor, en las que se percibe con claridad su estilo comprometido y crítico, reflejando con honestidad las condiciones de vida en las calles del mundo árabe.
La filosofía también ocupó un lugar central en su obra, especialmente en lo relativo a los conceptos de libertad, identidad y justicia social. Por ello, Ibrahim no fue solo un escritor: fue también un pensador social y un cronista de su época.
Sus obras permanecen como referentes ineludibles
Sus textos se convirtieron en una herramienta esencial para comprender las complejidades políticas, culturales y sociales del Egipto moderno y del mundo árabe en general. Sus obras permanecen como referentes ineludibles para quienes buscan comprender la evolución histórica y cultural de Oriente Medio.
A lo largo de su carrera, recibió numerosos premios, entre ellos el Premio Ibn Rushd de Pensamiento Libre en 2004 y el Premio Kavafis de Literatura en 2017.
Sin embargo, su independencia intelectual se mantuvo intacta: en 2003, rechazó el Premio del Foro de El Cairo para la Creatividad en la Novela Árabe, al considerar que el gobierno egipcio —encargado de otorgarlo— "carecía de la credibilidad necesaria" debido, entre otras razones, a la permanencia del embajador israelí en El Cairo pese a las agresiones contra el pueblo palestino.
La noticia de su muerte ha causado una profunda conmoción tanto en el ámbito cultural como a nivel oficial en el mundo árabe. El primer ministro egipcio, Mostafa Madbouli, y el ministro de Cultura expresaron su pesar a través de comunicados oficiales, destacando que la obra de Ibrahim “enriqueció la biblioteca literaria árabe y representa un reflejo honesto de la sociedad con todas sus contradicciones”.
“uno de los grandes historiadores de la era moderna”
Madbouli lo describió como “uno de los grandes historiadores de la era moderna, capaz de retratar la realidad a través de formas literarias únicas”.
Sonallah Ibrahim deja un vacío difícil de llenar, pero su voz —valiente, crítica y profundamente humana— seguirá viva en las páginas de sus libros y en la conciencia de generaciones futuras.
El Confidencial