El ultraderechista Vox planea sus propios límites a la compra de viviendas por parte de extranjeros en España

Vox, el partido político que recientemente propuso deportar a 8 millones de extranjeros en España , tiene sus propios planes para limitar la compra de propiedades por parte de los extranjeros.

El partido que preside Santiago Abascal ha propuesto de hecho una medida que ya propuso el presidente del Gobierno socialista, Pedro Sánchez, en enero: gravar más a los compradores extranjeros.

Además de este "régimen fiscal disuasorio", Vox también quiere priorizar el acceso de los españoles a la vivienda social y a los beneficios sociales relacionados.

Además, han propuesto suprimir el IVA y el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP) en la compra de primera vivienda, así como otras medidas para impulsar la construcción liberando suelo y simplificando trámites.

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Según informa la agencia de noticias española Europa Press, estas iniciativas se debatirán en la próxima sesión parlamentaria, tras una interpelación enviada la semana pasada a la ministra española de Vivienda, Isabel Rodríguez.

Una interpelación es un procedimiento parlamentario mediante el cual los legisladores interrogan formalmente a un funcionario del gobierno. Vox ha enviado cuatro interpelaciones a Rodríguez en el último año.

Vox dice estar en total desacuerdo con las políticas de vivienda propuestas por el gobierno de izquierda para ayudar a resolver la crisis inmobiliaria en España y las ha calificado de "ineficaces".

Sin embargo, no perdieron la oportunidad de achacar los problemas inmobiliarios de España a la inmigración ilegal, argumentando que existe una "relación directa entre la inmigración ilegal masiva y el aumento de los precios de la vivienda".

Abascal ha dicho anteriormente que el gobierno de izquierdas subvenciona viviendas para inmigrantes indocumentados , lo que les permite alquilar a un precio mucho más barato que a los españoles.

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A principios de este año, Pedro Sánchez dijo: "Hemos decidido que vamos a limitar la compra de propiedades por parte de extranjeros extracomunitarios desde fuera de la UE" mediante la elaboración de una ley para un impuesto del 100 por ciento sobre la propiedad para compradores extranjeros.

Esto afectaría a los compradores que no residen en la UE, no a los extranjeros residentes en España. Por lo tanto, los nuevos propietarios de segundas residencias en el Reino Unido y Estados Unidos pagarían el doble por una vivienda vacacional aquí.

Todavía no está claro si Vox querría que todos los compradores extranjeros se enfrentaran a su "régimen fiscal disuasorio" o si preferiría hacer una distinción entre los llamados "expatriados" y los que ellos consideran "inmigrantes".

En abril, los socialistas gobernantes presentaron la propuesta para este "superimpuesto", pero no ha llegado al Congreso y no ha habido ninguna actualización sobre cuándo o si se aprobará.

Otras medidas propuestas por Sánchez para intentar frenar la crisis de la vivienda son un programa de alquiler con opción a compra que daría a los jóvenes casi 30.000 euros para ayudarles a comprar eventualmente una propiedad, un seguro de impago de alquiler para los propietarios que alquilen a precios razonables a los jóvenes y más dinero asignado a los presupuestos de vivienda.

También han puesto en marcha soluciones para liberar suelo, aumentar la construcción de vivienda social y facilitar trámites, similares a las que propone Vox.